Documentos: Powerpoints:
Comentarios o Preguntas email:
|
ENCUENTRO CONTINENTAL DE EDUCADORES AGUSTINIANOS “EDUCACIÓN AGUSTINIANA Y
PROYECTO PASTORAL” TRUJILLO, PERÚ – ENERO
2010 LITURGIA
TRUJILLO 2010 ORACION
DE LAUDES M.
Oh sacramento de piedad, T.
Oh signo de unidad, oh fuente de fraternidad. El
que quiere vivir, tiene dónde vivir, tiene de qué vivir. M.
Oh Dios que por el misterio pascual de tu Unigénito realizaste la obra de
la redención humana, concédenos que este sacramento de
piedad se convierta en signo de unidad y en vinculo de caridad en nuestras
vidas. Por… M.
Ven Espíritu Santo...
Llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu
amor. M. Envía
tu Espíritu y serán creados. T.
Y renovarás la faz de la
tierra. M. Oh
Dios que por el Espíritu Santo
iluminaste la inteligencia de tus fieles con la luz de tu verdad.
Concédenos, que este mismo Espíritu, nos dé a conocer la verdad, a
gustar el bien, y llene nuestras almas
de consuelo y de alegría. Por Cristo…
M.
Dios mío, ven en mi auxilio. T.
Señor, date prisa en socorrerme. M.
Gloria al Padre
y al Hijo y al Espíritu Santo... T.
Como
era en un principio, ahora y siempre… DIA
PRIMERO
Invitatorio: Padre nuestro, que conoces a cada uno por su
nombre. Tú nos has elegido antes de la creación para ser santos en el amor.
Te ofrecemos este día, para que, en todos los acontecimientos, sepamos
reconocer tu voluntad. Que nuestra alegría y entusiasmo estén en comunión
contigo. Que en el trabajo y en el esfuerzo del día nos unamos al
Sacrificio de tu Hijo en vistas a la resurrección y a la salvación del
mundo. Concede a nuestros hermanos todos la gracia de descubrir el sentido
de la vida y el papel que han de realizar aquí en la tierra. Te lo pedimos
por Jesucristo nuestro Señor. Amén. ANTIF. 1ª Da
de lo que tienes para que merezcas recibir lo que no tienes.
(Salmo 114) Señor, ¿quién puede hospedarse en tu tienda y habitar en tu monte
santo? El que procede honradamente y
practica la justicia, el que tiene intenciones leales y no calumnia con su lengua, el que no hace mal a su prójimo ni difama al vecino, el que considera despreciable al impío y honra a los que temen al Señor. El que no retracta lo que juró ni aún en daño propio, el que no presta dinero a usura ni acepta soborno contra el inocente. El que así obra nunca fallará. Gloria al Padre... T.
(Antífona 1ª) Da de lo que tienes… ANTIF. 2ª Bendice,
alma mía, al Señor;
todo mi ser bendiga su santo nombre. (Salmo 103. A
dos coros) Bendice, alma mía, al Señor desde el fondo de mi ser. Bendice, alma mía, al Señor y
no olvides sus muchos beneficios. Bendice, alma mía, al Señor porque
él ha sido grande conmigo. Bendice, alma mía, al Señor porque ha llenado de paz mi vida. El Señor te ha perdonado todas tus culpas: te ha limpiado. El Señor te ha curado de todas tus dolencias: te ha sanado. El Señor te ha sacado de lo profundo de la fosa: te ha liberado. El Señor te ha puesto en pie después de la caída: te ha rescatado. El Señor te corona de amor y de ternura día a día. El Señor satura de bienes y regalos tu existencia. El Señor te guarda como a las niñas de sus ojos. El Señor renueva tu juventud
como el águila. El Señor ha sido clemente y compasivo contigo. El Señor ha sido tardo a la cólera y lleno de amor ante tus faltas. El Señor no guarda rencor de tus dobleces en su presencia. El Señor no te ha tratado como merecen tus culpas y pecados. El amor del Señor, alma mía, es más alto que los cielos. El amor del Señor, alma mía, es más grande que los mares. El amor del Señor, alma mía, es más fuerte que las montañas. El amor del Señor, alma mía, es más firme que nuestras rebeldías. Bendice, alma mía, al Señor, por la ternura de sus manos. Bendice, alma mía, al Señor, que es más bueno que una madre. Bendice, alma mía, al Señor, que él sabe lo frágil que es nuestro
barro. Bendice, alma mía, al Señor, que él comprende nuestro pobre corazón. Gloria al Padre... T.
– (Antífona. 2ª) Bendice,
alma mía, al Señor… LECTURA:
“Pónganse pues, el vestido que
conviene a los elegidos de Dios, sus santos muy queridos: la compasión
tierna, la bondad, la humildad, la mansedumbre, la paciencia. Sopórtense y
perdónense unos a otros si uno tiene motivo de queja contra otro. Como el
Señor los perdonó, a su vez hagan ustedes lo mismo. Por encima de esta
vestidura pondrán como cinturón el amor, para que el conjunto sea
perfecto. Así la paz de Cristo reinará en sus corazones, pues para esto
fueron llamados y reunidos. Finalmente, sean agradecidos.” Col 3, 12ss Responsorio breve. M. A ti, Señor, llamé: tú eres mi refugio. T. A ti , Señor, llamé: tú
eres mi refugio. M. Y mi lote en el país de la vida. T. Tú eres mi refugio. M. Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu santo. T. A ti, Señor, llamé: tú
eres mi refugio. Canto de Zacarías (Benedictus), pág. PRECES: M. Por
nuestra Iglesia, para que en su vida manifieste su dinamismo misionero
y evangelizador según la voluntad salvífica de Dios. Oremos. M. Por
los maestros agustinos, para que a través de nuestra vida, nuestra palabra
y nuestro ejemplo, seamos el instrumento dócil del Maestro Interior.
Oremos. M.
Señor, haznos personas alegres, que podamos acompañar en el sufrimiento
a quienes carecen de la verdadera alegría. Oremos. M. Por
viviendo con un alma sola y un solo corazón hacia Dios. Oremos. M. Por
esta asamblea de educadores, para que iluminados por el Espíritu,
nos esforcemos en discernir los caminos más adecuados que nos lleven,
como agustinos,
a ser signo de las exigencias del Reino en el hoy de nuestra historia.
Oremos. -Padre Nuestro... -Oración por la revitalización de ORACIÓN: “Dios, Padre nuestro, que nos
exhortas a la oración y nos concedes lo que te pedimos. Puesto que rogándote
vivimos mejor y nos hacemos mejores, escúchame a mí, que voy tanteando en
medio de estas tinieblas y alárgame tu diestra. Ilumíname con tu luz y
reclámame de mis errores, para que, siendo Tú mi guía, vuelva a mí y me
vuelva a Ti. (Soli.2, 6, 9).
Entrégate a mí, Dios mío, devuélvete
a mí. Mira, yo te amo. Si aún esto es poco, haz que te ame más
intensamente. Señor, cumple en nosotros lo que prometiste. Lleva a feliz término
lo que comenzaste. Cuida de los dones que nos diste y acrece en tu campo la
sitien-te que plantaste. Señor y Dios mío, Señor y Dios nuestro, haznos
felices de Ti, para que descansemos en Ti. Haznos felices de Ti, que no
pasas ni pereces. Mientras te tengamos a Ti, ni te perdemos a TI, ni nos
perdemos nosotros. Haznos, pues, felices de Ti”. Amén.
(Serm
113, 6) DIA SEGUNDO
Invitatorio: -Señor, en estos momentos de oración, nuestra
actitud es como la de María: estamos atentos a tu palabra:
He aquí la esclava del Señor. Hágase en mí según tu palabra. -Como Pedro, proclamamos nuestra fe en ti: -“Tú
eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo” Ponemos en Ti nuestra única esperanza: “Señor,
¿a quién iremos? Solo Tú
tienes palabras de vida eterna”. -Señor, a tu lado estaremos seguros: “Jesús,
te seguiremos a donde quiera que vayas”. -Sabemos que estamos manchados, por eso te
pedimos como el leproso: “Señor,
si quieres, puedes limpiarme”. -Y como el ciego de nacimiento acudimos a Ti
para que nos libres de nuestra ceguera: “Señor,
haz que pueda ver”. -Eres manantial de agua viva, por eso te decimos
como “Señor,
dame de esa agua aviva para que no tenga más sed” -En medio de nuestras dificultades, como tus
discípulos en la barca, acosados
por la tormenta, también te gritamos: “Señor, sálvanos que perecemos”. -Y deseamos, como los discípulos de Emaús, que
permanezcas siempre a nuestro lado: “Quédate
con nosotros, Señor”. ANFIF. 1
Queremos
fundamentar nuestro ser y
nuestro quehacer, en el llamado a compartir la vida, la interioridad y los bienes, en perfecta comunión.
(Dos
coros) Dos amores
alzaron dos ciudades; el amor de lo bajo, la ciudad baja, con
murallas, fosos y centinelas. Allí llaman los hombres “amo” al dinero, paz a la
muerte, porvenir al desastre y a la avaricia. Subversión a los gritos de
los obreros y pregonan
la cínica ley del más fuerte como justicia.
Arriba, en
la montaña, cerca del sol, / el amor de lo alto levantó la brillante
Ciudad de Dios. La habitan
los pacíficos, los inocentes, los que, por ser humildes, tienen la cumbre, los del
corazón lleno de mansedumbre; la buena gente que lleva el Evangelio escrito
en la frente. Ellos son
la semilla de la belleza, / ellos son la promesa de un mundo limpio y la
certeza de que dará su fruto tanta tristeza. Delante de
ti tienes las dos ciudades, / nadie vendrá a quitarte tu libertad, pero
tampoco a nadie podrás culparle del camino que sigas, del Señor
al que digas, / “quiero ser ciudadano de tu ciudad”. Sé que, a
veces, es duro subir al monte, / que es más fácil quedarse por las bajuras...
Pero la
ciudad baja siempre es oscura, / y arriba tienes el horizonte. Y si dejas
que pase de largo el barco / que lleva hacia la tierra prometida, si no haces
el futuro codo a codo, / pierdes tú vida, / y si pierdes la vida, lo
pierdes todo. Únete a
los amigos de la paloma. Deja que cuiden otros de la serpiente. El mundo
está empezando. De ti depende que se haga pleno día la luz que asoma. Coge lo más
hermoso que haya en tu casa y mételo en tu mochila de vagabundo y vente por
la senda de la alegría, para que un día, como la levadura en la masa, la
hermosura de todos fermente al mundo. Júntate a
los pequeños, a los sencillos, / a los que dicen siempre lo verdadero, a los puros
de espíritu / que no vendieron por un poco de astucia, sus ojos limpios.
Hallarás
otros locos en la tarea, / de todos los países y de todos los colores; esos son tu
familia, esa es con
pescadores, para hacer de los tiempos, tiempos mejores. Gloria al
Padre.... -T.
–(Antífona 1ª) Queremos fundamentar… ANTIF. 2ª
"Cuando oren a
Dios, con salmos e himnos
que sienta el corazón lo que dice la boca."
(A
dos coros ) Jesús, no
tiene manos. Tiene solo nuestras manos para
construir un mundo donde habita justicia. Jesús no
tiene pies. Tiene sólo nuestros pies para poner
en marcha la libertad y el amor. Jesús no
tiene labios. Tiene solo nuestros labios para
anunciar por el mundo Jesús no
tiene medios. Tiene solo nuestra acción para lograr
que todos lo hombres sean hermanos. Jesús,
nosotros somos tu Evangelio, el único Evangelio que la
gente puede leer, si nuestras vidas son obras y
palabras eficaces. Jesús,
danos tu musculatura moral para desarrollar nuestros talentos y hacer
bien todo lo que tenemos entre manos. Gloria al
Padre... T.
–(Antífona 2ª) Vivan
unánimes y concordes… LECTURA: “La palabra está
cerca de ti: la tienes en los labios y en el corazón. Se refiere a la
palabra de la fe que les anunciamos. Porque, si tus labios profesan
que Jesús es el Señor y tu corazón cree que Dios lo resucitó de
entre los muertos, te salvarás. Por la fe del corazón llegamos a la
justificación, y por la profesión de los labios, a la salvación”.
(Rm 10, 8b-10).
“No reina Dios por lo que uno come o bebe, sino por la justicia, la
paz y la alegría que da el Espíritu Santo; y el que sirve así a Cristo
agrada a Dios, y lo aprueban los hombres, En resumen: esmerémonos en lo que
favorece la paz y construye la vida común.” (Rm
14, 17ss) Responsorio breve: M. Que busquemos, Señor, ser tus discípulos. T. Que busquemos, Señor, ser
tus discípulos. M. Viviendo con un alma sola y un solo corazón hacia Ti. T. Ser tus discípulos. M. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. T. Que busquemos, Señor, ser
tus discípulos. Cántico
de Zacarías (Benedictus) pág. PRECES: M. Señor que nos llamaste al servicio de tu Iglesia desde la escuela. T. Danos ser siempre fieles al
espíritu de san Agustín y de nuestra Orden. M. Tú que concediste a san Agustín
vivir sabiamente en la fe, en la esperanza y en
la caridad de tu Iglesia, T. Haz que los agustinos
adelantemos continuamente en el camino de las virtudes para
gloria de Dios y salvación de los hombres. M. El amor de san Agustín y su obra se concentró plenamente en Ti, oh Señor,
T. Haz que todos nos
convenzamos de que nos hiciste para Ti y que nuestro corazón nunca
tendrá verdadero descanso hasta encontrarlo en Ti. M. Señor, san
Agustín en su Regla nos pide que tengamos un sólo corazón y
una sola alma dirigidos hacia Ti. T. Haz que siempre estemos
unidos en tu amor y en tu servicio. M. Dios que concediste a san Agustín
trascender con su mirada un
mundo que se derrumbaba y fijar su pensamiento en la verdad de lo eterno. T. Concédenos que las cosas
pasajeras de este mundo no nos impidan encontrar
en Ti el fundamento de la verdadera alegría. T. Padre
Nuestro... T. Oración
por la revitalización de ORACIÓN:
Señor,
Tú que me diste el que te encontrara y el ánimo para seguir buscándote,
no me abandones al cansancio ni a la desesperanza. Hazme buscarte siempre, y
cada vez con más ardor. Y dame
fuerzas para adelantar en tu búsqueda. Ante Ti pongo mi fortaleza y con
ella, mi debilidad. Acreciéntame la primera y cúrame la segunda. Ante Ti
pongo mi ciencia y con ella mi debilidad. Allí donde me abriste, recíbeme,
pues estoy llamando. Allí donde me cerraste, ábreme, pues estoy llamando.
Que me acuerde de Ti, que te comprenda, que te ame. Aumenta en mí tus
favores hasta que totalmente me reforme en Ti. Amén. (De
Trin. 15, 28,51) DIA TERCERO
Invitatorio: Ahora que la mañana es tan
pura y que no hay nadie más que tu, dime quién eres. Dime quién eres y
por qué me visitas, por qué bajas a mí que estoy tan necesitado y por qué
te separas sin decirme tu nombre. Dime quién eres, tú que andas sobre la
nieve; tú que, al tocar las estrellas en la noche las haces palidecer de
hermosura; tú que mueves el mundo tan suavemente que parece que se me va a
derramar el corazón. Dime quién eres; ilumina quién eres; dime quién soy
también, y por qué la tristeza de ser hombre; dímelo ahora que alzo hacia
ti mi corazón, tú que andas sobre al nieve. Dímelo ahora que tiembla todo
mis ser en libertad, ahora que brota mi vida y te llamo como nunca. Sostenme
en tus manos, sostenme en mi tristeza, tú que andas sobre la nieve. ANTIF. 1.
Guardo
tus palabras en mi corazón, ellas son en mi, camino luz y vida. Bendigan
al Señor todos los seres, bendigan al Señor. Bendíganlo,
pastores de las anchas llanuras, y
ustedes los tigres del África ignorada,
águilas
que miran de frente al sol, borrascas
de tibias
lluvias cayendo en las palmeras inclinadas calor;
barcos perdidos, solos, en las
calmas remotas, espejos tranquilos de los fiords; pinos de
Roma, olivos de Córdoba, abetos en las colinas frías y transidas de olor, arenas del
Sahara, selva del Amazonas, bendigan al Señor. Te bendigan,
Señor, las catedrales solas con
vidrieras que nadie ha podido alcanzar; bendígante
las islas sin playas ni bahías y los delgados arrecifes de coral. Bendígante
la voz del vendedor de frutas y
la brisa suave de la mar, y el pez
ciego de extraños colores que se desliza en la sima abismal. Alábente,
Señor, las estrellas, las nubes; diga tus alabanzas el tibio olor a pan de los
hornos al alba, y las campanas que
suenan solas en la tempestad. Digan tu
gloria los acordeones en los
puertos, el humo quieto sobre el volcán, los cometas
que pasan asustando luceros; alábente
los faros, de pie en el litoral, y los
trigales y las rosaledas y los leños en el hogar. Te bendigan
el que ara en los campos, el que cava en las minas, el que pesca en el mar. Bendígate
la noche y el día te bendiga, que te dé gloría el gozo y te alabe el
dolor; te bendiga
la niebla, el cielo limpio, el que contigo está y el pecador; el sediento
que anda buscando el manantial; que
te bendiga el odio, sin querer, y el amor. Espacios
infinitos, horas innumerables: bendigan al Señor. -Gloria al Padre... T.
–(Antífona 1ª) Guardo
tus palabras… ANTIF.
2 Pon amor en las cosas, y las
cosas tendrán sentido.
Retírales el amor y se tornarán vacías. (San
Agustín)
Señor,
Tú dijiste: Yo he venido a traer fuego a la tierra. - Queremos
arder allá donde nos mandes. Señor,
Tú dijiste: Si permanecen en mi , serán mis discípulos. - Que solo
nos mueva tu evangelio. Señor,
Tú dijiste: No he venido a traer la paz, sino la guerra. - No nos
dejes vivir tranquilos. Señor,
Tú dijiste: Entren por la puerta angosta, que es la
puerta que lleva a - No
queremos huir del sacrificio. Señor,
Tú dijiste: Por sus frutos los conocerán. - Queremos
que nuestros frutos sean siempre buenos. Señor,
Tú dijiste: La levadura debe fermentar toda la masa. - Queremos
ser levadura nueva de amor y verdad. Señor,
Tú dijiste: El que quiera venir en pos de mi, Niéguese a
sí mismo, tome su cruz, y sígame. - Si eL
mundo nos aborrece, sabemos que antes te aborreció a ti. Señor,
el que te encuentra a Ti, encuentra la luz. - Amigo, no
permitas que andemos en las tinieblas. Gloria
al Padre.... T.
– (Antífona 2ª) Pon
amor en las cosas… LECTURA:
“Malas palabras no salgan de
vuestra boca; lo que digan sea bueno, constructivo y oportuno, así harán
bien a los que los oyen. No pongan triste al Espíritu Santo de Dios con que
El les ha marcado para el día de la liberación final. Destierren de
ustedes la amargura, la ira, los enfados e insultos y toda la maldad. Sean
buenos, comprensivos, perdonándose unos a otros como Dios les perdonó en
Cristo.” (Ef. 4, 29ss).
“Manténganse unánimes y concordes, con un mismo amor y un mismo sentir.
No obren por rivalidad ni por ostentación, déjense guiar por la humildad y
consideren siempre superiores a los demás. No se encierren en sus intereses
sino busquen todos el interés de los demás.” (
Flp 2, 2b-4) Responsorio
Breve: M.
Ayúdense a llevar mutuamente sus cargas, y así cumplirán T.
Ayúdense a llevar mutuamente sus cargas, y así cumplirán M.
Sean buenos, comprensivos, perdonándose unos a otros como Dios les perdonó
en Xto. T.
Y así cumplirán la ley de
Cristo. M.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu santo. T.
Ayúdense a llevar mutuamente sus cargas, y así cumplirán Canto
de Zacarías (Benedictus), pág. PRECES:
M.
Para que nos mantengamos dóciles al Espíritu Santo.
Que él guíe nuestros proyectos y nuestros afanes educativos. Oremos
al Señor. M.
Por todos los educadores, laicos y religiosos de nuestros colegios,
para que seamos siempre presencia viva de Jesús en la escuela y en
la vida. Oremos. M.
Para que podamos hacer desde la escuela un mundo de paz y de inclusión
para que brille la esperanza y la sonrisa en los hombres. Oremos. M.
Para que hagamos de nuestros colegios una comunidad
y un proyecto en los que
viva Jesucristo. Oremos. M.
Señor, escucha la voz de A. Latina, escucha la voz de nuestras comunidades
educativas
para que podamos vivir y compartir el amor que nos tienes
bajo la protección de nuestro padre San Agustín. Oremos. T.
Padre Nuestro... T.
Oración por la revitalización de ORACIÓN:.Danos
tu lección de amor, Tú que te llamas amor, y no sabes más, no puedes más,
no tienes más. Quítanos este corazón de piedra y danos tu corazón de
carne para que amemos, y perdonemos, y levantemos, y construyamos. Por eso
te decimos, Señor, ve delante de nosotros para guiarnos, ve detrás de
nosotros para impulsarnos, ve debajo de nosotros para levantarnos, ve sobre
nosotros para bendecirnos, ve alrededor de nosotros para protegernos, ve
dentro de nosotros para que con cuerpo y alma te sirvamos para gloria de tu
nombre. Amén. DIA CUARTO
Invitatorio: Otra vez –te conozco- me has llamado Y no es la hora, no; pero me avisas.
De nuevo traen tus celestiales brisas claros mensajes al acantilado del
corazón, que, sordo a tu cuidado, fortalezas de tierra eleva, en prisas de
la sangre se mueve, en indecisas torres, arenas, se recrea alzado. Y tú
llamas y llamas, y me hieres y te pregunto aún, Señor, qué quieres, qué
alto vienes a dar a mi jornada… Perdóname si no te tengo dentro, si no sé
amar nuestro mortal encuentro, si no estoy preparado a tu llegada. Buenos
días, Señor. Tu presencia es más real en nosotros que el aire que ahora
nos permite respirar. Haz, Señor que sintamos cómo tu presencia nos
ilumina por dentro. Que en este rato de oración dejemos que te
transparentes a través de nosotros para que la fe de cada unos e fortalezca
con la oración de la comunidad. Danos una fe cimentada en ANTIF. 1ª
La
verdadera comunidad no se mide por intereses temporales
ni personales, sino por el amor gratuito a Dios y al prójimo. (Dos
coros) Qué bueno,
qué dulce habitar los hermanos juntos. Qué bueno es vivir como racimos
todos. Qué dulce
es sentirse acompañado de los
hermanos. Qué
maravilloso, Señor Jesús, es vivir todos juntos en comunidad. Todos
unidos en comunidad, somos como una espiga madura. Todos
unidos en comunidad, somos como una colmena trabajadora. Todos
unidos en comunidad, somos piedras que sostienen la casa. Todos
unidos en comunidad, somos como granos de arena que forman una playa. Tu nos
quieres, Señor Jesús, miembros de una misma familia. Nos quieres
sentados alrededor de tu Palabra y de tu Pan. Tu nos has
reunidos con la fuerza de tu Espíritu de amor. Tu eres el
centro y la fuerza de nuestras vidas. Tu llamaste
a los doce a juntarse como amigos a tu lado y les diste
como norma el servicio y el compartir. Les diste
el reto de olvidarse cada cual de sí mismo. Les
desafiaste a ocupar el último lugar como norma en el vivir. Tú nos
diste una ley para vivir en comunidad y ser hermanos. Tú ley es
para corazones que saben amar sin pedir nada a cambio. Tú nos
diste el mandamiento nuevo para corazones nuevos. Tú hiciste
del amor la norma esencial de tu Reino. Queremos,
Señor, hacer de tu Palabra un camino para
nuestra vida; queremos
amar tu voluntad de todo corazón.
Queremos
guardar puro nuestro camino cumpliendo tu Palabra;
de todo
corazón te andamos buscando, Señor. Queremos
ser discípulos tuyos y ponernos a tu escucha cada día;
queremos
hacer de tu Palabra la norma que nos guíe, paso a paso; encontrar
en tus mandatos y preceptos nuestras delicias. Abre
nuestros ojos, Señor, a la luz y al calor de tu
Palabra. Que bueno,
qué dulce, habitar los hermanos juntos. Qué bueno,
Señor Jesús, tenerte a ti como centro de nuestra comunidad educativa. Gloria al
Padre... T..
–(Antífona 1ª) La verdadera comunidad… ANTIF. 2ª
Vivan
en la casa unánimes y concordes,
tengan un alma sola y un solo corazón orientados hacia Dios. Bendito sea
Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha
bendecido en la persona de Cristo con toda
clase de bienes espirituales y celestiales. El nos
eligió en la persona de Cristo, / antes
de crear el mundo, para que fuésemos
consagrados / e irreprochables ante él por el amor. El nos ha
destinado en la persona de Cristo, / por pura iniciativa suya, a ser sus
hijos, / para que la gloria de su gracia, / que tan
generosamente nos ha concedido en su querido Hijo, redunde en
alabanza suya. Por este
Hijo, por su sangre, / hemos recibido la redención, / el perdón de los
pecados. El tesoro
de su gracia, sabiduría y prudencia / ha sido un derroche para con nosotros,
dándonos a
conocer el misterio de su voluntad. Gloria al
Padre... T.
–(Antífona 2ª) Cuando oren a Dios… LECTURA:
“Hermanos: vuestra vocación es
la libertad. No una libertad para que se aproveche la carne, al contrario,
sean esclavos unos de otros por amor. Porque la ley se concentra en esta
frase: amarás al próximo como a ti mismo”. (Gal
5 13-14) “Por eso les digo: caminen
según el espíritu ay así no realizarán los deseos de la carne. Pues los
deseos de la carne se oponen al espíritu y los deseos del espíritu se
oponen a la carne. Los dos se contraponen de suerte que ustedes no pueden
obrar como quisieran. Es fácil reconocer lo que proviene de la carne:
libertinaje sexual, impurezas y desvergüenzas, culto de los ídolos y magia;
odias, ira y violencia, celos furores, ambiciones divisiones, sectarismo y
envidias; borracheras, orgías y cosas semejantes. Les he dicho, y se lo
repito: los que hacen tales cosas no heredarán el Reino de Dios. En cambio,
el fruto del Espíritu es caridad, alegría, paz, comprensión de los demás,
generosidad, bondad, fidelidad, mansedumbre y dominio de sí mismo”.
(Gal 5,19-22)
Responsorio Breve: M. Qué bueno y agradable cuando viven unidos los hermanos. T. Qué bueno y agradable
cuando viven unidos los hermanos. M. Esta es la bendición que manda el Señor: la vida para siempre. T. Cuando viven unidos
los hermanos. M. Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. T. Qué bueno y agradable
cuando viven unidos los hermanos. Canto de
Zacarías (Benedictus) pág. PRECES: Al
Padre de los cielos, que quiere la unidad de todos los hombres
dirijámosles nuestras súplicas. M.
Por el Papa y
caminos de solidaridad, unidad e interculturalidad entre los pueblos,
Oremos al Señor. M. Por
promueva espacios de diálogo, solidaridad y justicia social en el
mundo. Oremos. M.
Por los agustinos de América Latina para que trabajemos fervientemente la
unidad,
e inclusión como signos del Reino en un continente roto por la
injusticia y la división. M. Por
todos nosotros, reunidos por la fe e invitados a ser luz y sal, fermento y
testimonio;
para que asumamos que tenemos que aprender a morir como el grano de
trigo
para gozar de la resurrección y del triunfo
de Jesús. Oremos. M. Por
nuestros familiares difuntos y por los difuntos de nuestra Orden,
para que desde la otra
orilla fortalezcan nuestra fe en Oración
por ORACIÓN:
Tu
eres un Dios de vivos, no de muertos, no reinas sobre cadáveres, ni te
vistes de los despojos de los caídos. Donde estás tú, florece la vida con
el empuje verde de la primavera. Danos valor para afrontar la tragedia, para
mirarla cara a cara, y traspasar desde ahora el muro de la muerte, llevando
una vida de resucitados. Te lo pedimos por Jesús que murió y vive. - Amén.
DIA
QUINTO
Invitatorio: Cada mañana sales al balcón
y oteas el horizonte por ver si vuelvo. Cada mañana bajas saltando las
escaleras y echas a correr por el campo cuando me adivinas a lo lejos. Cada
mañana me cortas la palabra y te abalanzas sobre mí y me rodeas con un
abrazo redondo el cuerpo entero. Cada mañana contratas la banda de músicos
y organizas una fiesta por mí, que andaba perdido. Cada mañana me dices al
oído con voz de primavera: hoy puedes empezar de cero. Señor:
me cuesta comenzar este día, porque sé que es una nueva tarea, un nuevo
compro-miso, un nuevo esfuerzo. Pero quiero comenzarlo con entusiasmo, con
alegría reestrenada, con ilusión nueva. Sé que estás a mi lado: en mi
familia, en mis amigos en mis cosas, en mi propia persona. Gracias pro este
nuevo amanecer, gracias por este nuevo empezar. Gracias por esta tu
presencia. Quiero sembrar la paz solidaridad, amor entre mis hermanos y sé,
Señor, que esta tarea la comienzan cada día muchos hermanos en cualquier
punto de la tierra. Y eso me alienta y empuja. También te pido por todos
ellos y con ellos te digo buenos días, mi Señor y mi amigo. Amén. ANTIF.
1 Tarde
te amé, oh hermosura siempre antigua y siempre nueva.
Tarde te amé.
Pobre y vacío pero te amé.
(Salmo Dichoso el
que está absuelto de su culpa, / a quien le han sepultado su pecado; dichoso el
hombre a quien el Señor no le apunta el delito. Mientras
callé se consumían mis huesos, rugiendo todo el día, porque día
y noche tu mano pesaba sobre mí; / mi savia se me había vuelto un fruto
seco. Había
pecado, lo reconocí, no te encubrí mi delito; / propuse: "confesaré
al Señor mi culpa" y tú
perdonaste mi culpa y mi pecado. Por eso,
que todo fiel te suplique en el momento de la desgracia; la crecida
de las aguas caudalosas no lo alcanzará. Tú eres mi
refugio, me libras del peligro, / me rodeas de cantos de liberación. Te instruiré
y te enseñaré el camino que has de seguir, / fijaré en ti mis ojos. No sean
irracionales como caballos y mulos, / cuyo brío hay que domar con freno y
brida; si no, no
puedes acercarte. Los
malvados sufren muchas penas; /
el que confía en el Señor, la misericordia lo rodea. Alégrense
justos y gocen con el Señor, / aclámenlo los de corazón sincero. Gloria al
Padre... T.
– (Antífona 1ª) Tarde te amé… ANTIF.
2ª Nosotros sabemos que hemos sido trasladados
de la muerte a la vida porque amamos a los hermanos. Pacientemente
estás aguardando a la orilla de mi vida, tú, «pescador divino». ¡No sé cuánto
tiempo llevas ya: horas, días... tal vez años! Has visto
desilusionado cómo me acercaba al «señuelo» que me echabas,
¡pero ni
por esas!... yo no jalaba ni te hacía caso. Te ibas, no cansado, pues tu
paciencia es infinita, sino esperanzado y diciendo: «otro día será»... Y ahora veo
que sigues empeñado en mis idas y venidas en el agua de la vida, porque me
amas. Sé que no quieres aprovecharte de mí,
como hacen los demás, sino que
por el contrario, me das más agua, más río, más lago, más océano. «Pescador
de hombres», a lo divino: gracias por tus esperas ante mi vida y que
fueron para ti aburridas y monótonas: perdón por la indiferencia en el
probar del manjar que tú me dabas. ´Podría
la madre olvidarse del hijo que engendró,
pero no tú
del hombre que creaste´: de mí, tu hijo, que
regeneraste un día en las aguas bautismales. Gloria al
Padre… T.
–(Antífona 2ª) Nosotros
sabemos… ANTIF.
3ª “Yaciendo en el lecho,
miraba y leía los salmos penitenciales de David,
puestos en la pared, y lloraba continuamente y en abundancia.” (S.
P.)
-
Porque eres bueno...
(Todos) perdónanos. -
Porque eres limpio.... (Todos) límpianos. -
Reconocemos nuestras culpas... absuélvenos. -
Nacimos en un clima de pecado... compadécenos. -
Porque eres como la nieve... niévanos -
Con tu alegría inagotable... alégranos. -
Porque eres puro y siempre nuevo ... renuévanos. -
A tu mirada de luz y gozo... acércanos. -
En tu amistad gozosa.... afiánzanos. -
De la ira y de la sangre... líbranos. -
Nuestros labios mudos de vergüenza... ábrenos. -
Y el corazón rendido... tómanos. -
Somos tu viejo pueblo... únenos. -
Tu pueblo arrepentido... perdónanos. -Gloria al Padre... T.
–(Antífona 3ª)
Yaciendo en el lecho… LECTURA: Queridos
hermanos: tengan horror al mal y pasión por el bien. Ámense cordialmente
con amor fraterno, estimando a los otros como más dignos. Con solicitud
incansable y fervor de espíritu, sirvan al Señor. Alégrense en la
esperanza, sean pacientes en la tribulación y perseverantes en la oración.
Consideren como propias las necesidades de los santos y practiquen
generosamente la hospitalidad. (Romanos)
Responsorio Breve. M. Señor, que no nos cansemos de hacer el bien. T. Señor, que no nos
cansemos de hacer el bien. M. Tu que eres bondad infinita. T. De hacer el bien. M. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo. T. Señor, que no nos
cansemos de hacer el bien. Canto de Zacarías (Benedictus), pág. PRECES: Al
Padre de los cielos, que quiere la unidad de todos los hombres, dirijámosle
nuestras peticiones: -Por el Papa y caminos
de solidaridad, inclusión y unidad entre los pueblos y las personas. Oremos.
-Por promueva
espacios de diálogo., solidaridad y justicia social desde la escuela.
Oremos. -Por los agustinianos de América Latina para que trabajemos
fervientemente la
espiritualidad de comunión como signo del Reino en un continente roto por
la división. O. -Por esta Asamblea, para que iluminados por el Espíritu, nos
esforcemos en
discernir los caminos más adecuados que nos lleven, como agustinianos, a
ser sal, luz y fermento de tu Reino en la escuela. Oremos. -Uniéndonos
a nuestros hermanos de y
en profunda solidaridad con los pueblos donde trabajamos como operarios de
su Reino, hagamos
presente al Padre común que vamos a trabajar por la inclusión y
por la fraternidad, orando como el Señor Jesús nos enseñó. T. Padre Nuestro... T. Oración por la revitalización de América Latina. Pág. ORACIÓN:
Gracias,
Señor, por haberte hecho humano como nosotros. Por predicar
PETICIONES
AGUSTINIANAS M.
Padre de amor, al comenzar este día te presentamos la vida y la acción
de los agustinos en América Latina. T.
Haz
que el evangelio sea siempre nuestro modelo y nuestro ideal M.
Padre de misericordia, te pedimos por los Agustinos de América Latina. T.
Ayúdanos a profundizar en la exigencias de un modelo
de vida conforme a nuestro
carisma y a ponerlas en práctica. M.
Padre Santo, ilumínanos al revisar toda nuestra vida
con humildad y sinceridad.
T.
Para poder convertirnos y dar testimonio de tu Reino. M. Padre
bueno, danos la fortaleza para revisar las obras y servicios que realizamos... T.
Y haz que estemos dispuestos a potenciar los que
responden a nuestro proyecto ideal y
a dejar los que no sean coherentes con él. M.
Padre Omnipotente y Eterno, ayúdanos a definir claramente un nuevo estilo
de presencia agustiniana
en nuestro Continente Latinoamericano. T.
Que responda a los signos de los tiempos y lugares. M.
Padre, tú que eres el dueño de la mies y de los sembrados... Concédenos
que nuestro estilo de presencia en América Latina entusiasme a
los
jóvenes y es ayude a entregarse a tu servicio según el carisma agustiniano. M.
Padre que estás en el Cielo, por intercesión de
Madre de T.
Te
pedimos ser como ella, cada día más fieles a tu plan de salvación
Universal. CANTICO
DE ZACARIAS (Lc 1,68-79) Bendito
sea el Señor, Dios de Israel, porque
ha visitado y redimido a su pueblo, suscitándonos
una fuerza de salvación en
la casa de David, su siervo, según
lo había predicho desde antiguo por
boca de sus santos profetas. Es
la salvación que nos libra de nuestros enemigos y
de la mano de todos los que nos odian; realizando
así la misericordia que tuvo con nuestro padres recordando
su Santa Alianza y
el juramento que juró / a nuestro padre Abraham. Para
concedernos que, libres de temor, y
arrancados de la mano de los enemigos, le
sirvamos con santidad y justicia en
su presencia todos nuestros días. Y
a ti, Niño, te llamarán profeta del Altísimo porque
irás delante del Señor a preparar sus caminos anunciando
a su pueblo la salvación, / el perdón de sus pecados. Por
la entrañable misericordia de nuestro Dios nos
visitará el sol que nace de lo alto, para
iluminar a los que viven en tinieblas y en sombra de muerte, para
guiar nuestros pasos por el camino de la paz. Gloria
al Padre...
ORACION
POR EN
AMERICA LATINA Dios,
creador nuestro, que nos amas, ayúdanos
a experimentar tu amor en comunidad, y
a dar testimonio a todos de tu amor. Jesús,
Señor y hermano nuestro, que
viviste entre los pobres, ayúdanos
a estar atentos a
la realidad en que vivimos a
inculturarnos y
a optar por los más necesitados y postergados. Espíritu
Consolador, anima
nuestras comunidades y
ayúdanos en el proceso de diálogo, reconciliación
y comunión, para
poder responder con fidelidad a
lo que nos pide una
nueva evangelización desde tu Palabra y
desde nuestra espiritualidad agustiniana. Santa
María, Madre del buen Consejo, Señora
de América Latina, intercede por nosotros. Amén. |